LA MISION DESDE LA CAÑADA REAL: MARÍA MADOZ

I,-        Presentación de la realidad: tareas o ministerios que han realizado.
II.-      Logros y dificultades.
III.-    Vivencia de la misión desde esas acciones pastorales.
IV.-    Relación de la misión realizada desde la iluminación de la Iglesia en la exhortación Evangelii                   gaudium.
Mi experiencia de voluntariado se remonta a muchos años atrás, allá por los años 90, cuando fui destinada a Salamanca al barrio de la Vega, fue mi primera experiencia con el mundo marginal, acompañando a familias, en el proyecto de Caritas. Puedo decir que aprendí mucho, me enseñaron cómo estar, cómo acercarme, cómo hacer camino sin poner la mirada en conseguir resultados, valorar a las personas por lo que son, no juzgar, respetar historias, procesos. Aquellas mujeres hablaban con dolor pero con tanta naturalidad de su infancia, con tanta transparencia!, vidas marcadas por todo tipo de exclusión y marginación. Vidas rotas y difíciles de rehacer.

El papa Francisco dirá con acierto en la Exhortación “La alegría del Evangelio” nº 193

“El imperativo de escuchar el clamor de los pobres se hace carne en nosotros cuando se nos estremecen las entrañas ante el dolor ajeno”

Desde entonces no me he desligado del todo, de este mundo, de alguna manera he estado en contacto. 

He colaborado en la acogida de caritas en la parroquia “Patrocinio de San José” durante el curso pasado. También doy clases de adultos en la parroquia de la Peña.

Voy a comunicar mi experiencia en la Cañada Real. Veamos algunas imágenes para hacernos un poco de idea de la realidad de este lugar.

El año 2009 el arzobispo de Madrid D. Antonio Mª Rouco y el Vicario de la IV cuarta se dirigió a las Superioras mayores de las congregaciones pidiendo hermanas para colaborar con Caritas en la Cañada y también ofrecían vivienda, para quien quisiera ir a vivir. Yo entonces estaba en el G. Provincial y me quedé con aquel interrogante. Cuando salí me presenté en Cáritas.

Caritas tiene un proyecto en la Cañada para menores y adultos. Por las mañanas con adultos hombres y mujeres y por la tarde con niños y adolescentes.

Cada día de la semana se trasladan los voluntarios/as (la mayoría religiosas) desde el centro de Caritas de Vallecas a la Cañada. 

Todas las mañanas se atiende a mujeres y hombres ofreciéndoles un espacio para la cultura, la formación, la salud, el encuentro, el reconocimiento de su dignidad… Vienen buscando muchas veces ayuda material y económica, o también un lugar donde sean respetados, entendidos desde su realidad y un espacio para comunicar sus experiencias y realidades que a veces son muy duras (sobre todo en las mujeres) por su propia cultura y religión.

Las actividades que ofrece Caritas son: Alfabetización, sobre todo el español, con distintos niveles, Está ordenado en tres niveles, (hay quien está iniciando en la comprensión del español, otros van entendiendo un poco más y otro un poco más avanzados). Informática, taller de peluquería, preparación para sacar carnet de conducir y habilidades sociales. Además hay una atención especial para ayuda de documentos y otras gestiones. 

En un primer momento estuve con menores y actualmente estoy con mujeres, impartiendo clases de español, la mayoría de Marruecos, todas de religión musulmana, hay alguna búlgara. Vivo con la certeza que todo lo que se haga por la mujer se está colaborando a favor de la familia, la educación de los niños, en definitiva por la sociedad.

El papa Francisco sigue diciendo: 

187. “Cada cristiano y cada comunidad están llamados a ser instrumentos de Dios para la liberación y promoción de los pobres, de manera que puedan integrarse plenamente en la sociedad; esto supone que seamos dóciles y atentos para escuchar el clamor del pobre y socorrerlo”.

Vivo con la convicción de que la vida es para entregar sin esperar nada a cambio y que tantas veces aunque haya sinsabores percibo que recibo mucho más de lo que doy. Recibo cercanía, afecto, dinamismo, posibilidad de contactar con la realidad, crecimiento personal, nuevos retos y…, dificultades y sinsabores, sí. Forman parte del convivir diario. 
A veces me surge la pregunta qué hago yo en medio de musulmanas. Me responde el evangelio de Mt “dar gratis lo que habéis recibido gratis” y el papa Francisco una vez más ilumina mis preguntas: nº199. “Nuestro compromiso no consiste exclusivamente en acciones o en programas de promoción y asistencia; lo que el Espíritu moviliza no es un desborde activista, sino ante todo una atención puesta en el otro «considerándolo como uno consigo». Esta atención … es una verdadera preocupación por la persona, a partir de la cual deseo buscar efectivamente su bien. Esto implica valorar al pobre en su bondad propia, con su forma de ser, con su cultura, con su modo de vivir la fe. El verdadero amor siempre es contemplativo, nos permite servir al otro no por necesidad o por vanidad, sino porque él es bello, más allá de su apariencia: «Del amor por el cual a uno le es grata la otra persona depende que le dé algo gratis».


No es tanto lo que yo puedo aportar con mis clases de español, más sí creo es importante, mi relación con ellas, el reconocer y considerar sus valores culturales, su religión, respetar las diferencias de cada persona, para que se sientan dignas y libres. Ya que la dignidad refuerza la personalidad, fomenta la sensación de plenitud y satisfacción.

Trato de vivir mi vida respondiendo a la vocación que he sido llamada y que Dios se me hace presente en las realidades cotidianas, supone una actitud vigilante para saber discernir la llamada y mi respuesta.

POSIBLE FUTURO

LA CAÑADA REAL

-Las viviendas todas ellas son ilegales, nadie tiene escrituras o documentos de propiedad. Se dice que hay un plan para el sector 6 para zona industrial.

- Que cada vecino pueda tener su vivienda en propiedad, por otra parte piden una serie de requisitos que los de la Cañada no pueden acceder, Caritas está gestionando con la comunidad de Madrid para que puedan quedarse en la Cañada.

EL GALLINERO

- Está en vías de desaparición, están tirando las casas pero el problema es dónde se alojan tantas familias y niños. De momento se van a otras casas y viven hacinados.

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